Entrada Mi Secreto

Erase que se era, y por entonces ya existía, aquello a lo que han llamado poesía.
Dulces letras que salen del alma y pintan un sentimiento no explicado con palabras.
¿Palabras o letras?...
Erase que se era...

miércoles, 14 de diciembre de 2011

LA HORA DEL ADIÓS...

Es ese instante en el que todo lo vivido con anterioridad se vuelve triste y gris y al mismo tiempo, el momento en el que deseas que todo ese tiempo pasado volviera a repetirse una y otra vez. 
Es el momento en el que comienzas a valorar los tiempos vividos. Es el momento más amargo del día, ese que nunca quieres alcanzar, aunque sabes conscientemente que sin ningún lugar a dudas llegará. 
Es el segundo que quieres convertir en interminable, diciendo adiós repetidas veces, para que parezca que nunca te vas. 
Es un segundo insuperable, y que pasado, ya necesitas que pasen todos los segundos del reloj para volver a ver el amanecer de un nuevo día, esperando de este modo el nuevo reencuentro.
Es el momento en el que observas con atención sus gestos, sus facciones, sus manos, para que su imagen quede grabada en tu retina por siempre.
Momento en el que todo lo que ocurre a tu alrededor no es más que su respiración, sus palabras, sus labios y sus "te quiero". Es el momento más abominable que una persona vive cuando se separa del amor de su vida.
La hora del adiós es la más vil de las horas, la que nadie desea para nadie, la que te deja el corazón completamente vacío, sintiendo que de todas mis heridas tú fuiste la más hermosa.
Es la hora que te hace vivir pensando en el "ya queda menos para volver a verte..."

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