Hay seres que en esta vida y en otras merecen la bendición de Dios.
Apaciguan tus deseos, te hacen sentir terrenalmente válido, te acompañan en el camino de la vida sin un pero ni un por qué, perdonan las deudas de tu alma y ante todo saben valorar tus defectos...
Se clasifican como seres maravillosos, que están por encima del montón, que valen su peso en oro y es que madre sólo existe una.
Aquella por la que vives desde que naces, aquella por la que creces mientras te desarrollas, aquella que es fuente de tu sabiduría para una infinidad de preguntas, que ningún sabio sabría responderte como lo hace ella.
Es aquella que vendería su alma al diablo por tu bienestar, aquella que no desearía otra cosa que su prolongación, es decir, su hijo, la carne de su carne permaneciera a su lado de por vida.
La Madre, y lo digo con letras mayúsculas, es la mejor de las personas en esta era moderna en la que vivimos. La que te va a reportar ilusión en la vida, conocimientos, saber estar, tranquilidad y sobre todo a la que siempre le deberemos algo tan grande, como es el respirar.
Eso es, un ser maravilloso e incansable que únicamente vive y respira para lograr que su prolongación sea un ser completo en este mundo de locos...
2 comentarios:
De parte de todas las madres que estarán orgullosas de leer esto, GRACIAS. Vivimos para nuestros hijos, son nuestra razón de ser...
Esta vez iba por tí, por todo lo que vales como madre, como hermana, como confidente y como la fuente de toda mi sabiduría. Ánimo que ser madre es lo más bonito que te ha dado este mundo...
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